Lugares para enamorarte de Navarra
En el artículo de hoy vamos a recorrer Navarra, una provincia de España con una inmensa riqueza natural y en la que merece la pena perderse varios días para disfrutar de sus rincones.
Estamos acostumbrados al turismo masificado de ciudades de varios millones de habitantes, donde para ver bien cualquier lugar tienes que esperar una larga cola o pelear con un grupo de gente para poder disfrutar del momento. Aunque a veces ese tipo de turismo está bien, el turismo más rural y un poco más relajado nos permite disfrutar de lugares idílicos a la vez que estamos relajados.
Recorriendo la geografía de Navarra vamos a centrarnos en esos rincones poco conocidos por el turismo, pero que sin embargo tienen varios motivos de peso para hacer una escapada. Desde parajes naturales que nos regalan escenarios de película, hasta antiguas edificaciones llenas de historia.
Bárdenas Reales
El primer destino de la lista no podría ser otro que las Bárdenas Reales de Navarra. Conocido también como el Death Valley (Valle de la muerte) español las Bárdenas Reales es uno de los parques naturales más impresionantes de toda España. Cuando hablamos de parques naturales cabría esperar un lugar lleno de vegetación y en este caso nos encontramos con todo lo contrario, un aglomerado de formaciones rocosas y tierra árida que hacen este paisaje más propio del desierto de Arizona que del norte de España.
Las Bárdenas Reales podemos visitarlas mediante algunas rutas de senderismo, o si nos gusta más ir motorizados también hay empresas que ofrecen rutas en 4x4 o segways. En su interior también podemos encontrarnos con un hotel burbuja donde pasar la noche contemplando la inmensidad del cielo sin un ápice de contaminación lumínica.
Las Cuevas de Zugarramundi
A continuación nos vamos al norte de Navarra para visitar la pequeña localidad de Zugarramundi y sus cuevas. Estas cuevas se han convertido en uno de los principales reclamos turísticos de este pequeño pueblo navarro por dos motivos, por su riqueza natural y por su historia, tanto con la brujería como con el contrabando, ya que están muy cerca de la frontera con Francia.
La belleza de la zona merece pasar una mañana entera en este enclave natural y disfrutar no solo de las cuevas, sino de todo el entorno natural que nos ofrece unas vistas impresionantes de la zona. Además también podemos aprovechar para visitar el museo de las brujas, otro de los atractivos turísticos del pueblo.
La Ciudadela de Pamplona
En Navarra también nos encontramos con monumentos claves tanto en su historia como en la historia de España y hoy estamos hablando del mejor ejemplo de arquitectura militar de la historia de España durante el Renacimiento, la Ciudadela de Pamplona. Una extensión total 280.000 metros cuadrados construida entre el siglo XVI y el siglo XVII con el objeto de proteger Pamplona.
Su estructura original tenía forma de pentágono aunque finalmente por el crecimiento de la ciudad se vieron obligados a modificar su distribución original. Hoy en día muchas de sus edificaciones sirven de edificios públicos, museos e incluso pabellones deportivos. Sin duda uno de los sitios donde tenemos que ir si pasamos un día por Pamplona y queremos conocer su historia.
Foz de Lumbier
Siguiendo con el patrimonio natural que tiene Navarra hablamos ahora de Foz de Lumbier. Este enclave natural consiste en una garganta tallada con precisión por el paso del río Irati, el paisaje que forma esta garganta junto con la biodiversidad del entorno hace que algunas personas consideren a Foz de Lumbier como el tesoro escondido de Navarra.
Esta garganta y su entorno son un sitio perfecto para pasar un día en contacto con la naturaleza, pero sobre todo si eres un amante del senderismo o trekking este sitio es para ti. A lo largo de la garganta hay una ruta de senderismo de 3,5 kilómetros perfectamente señalada y de dificultad fácil, por lo que es ideal para hacerla con los peques de la casa y que aprendan a apreciar la naturaleza en todo su esplendor.
Palacio Real de Olite
Por último, hablaremos de otro de los monumentos históricos más emblemáticos de Navarra, el Palacio Real de Olite. Este palacio del siglo XIV y que fue residencia de los reyes de Navarra es el monumento más visitado de Navarra, y desde luego, no es para menos. A lo largo de su historia el palacio ha sufrido bastantes batallas, ataques e incluso incendios, quedando en un estado bastante ruinoso antes de su restauración.
Actualmente se encuentra restaurado por completo y podemos disfrutar de una imponente construcción medieval que parece sacada de una película, de hecho ha sido escogida como escenario para rodar alguna. Durante la visita, que aunque es de pago tiene un precio bastante económico, 3,5 euros, nos contaran al detalle la historia del castillo y podemos ir viendo diferentes imágenes del estado del Palacio en diferentes épocas.
