Nos vamos a la playa de Guadalmar, en Málaga

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Situado a ocho kilómetros de la ciudad de Málaga, hace ya bastantes años que Guadalmar perdió su identidad de pueblo costero para pasar a ser un barrio más de la capital malagueña. En torno a su playa se aglutinan un buen número de hoteles y apartamentos, y además también posee un animado paseo marítimo.

Aunque no vamos a negar que es ésta una zona muy urbanizada, se compensa con una gran cantidad de espacios verdes. En el barrio abundan los eucaliptos, con su intenso y peculiar olor, y en sus ramas veremos unos singulares habitantes. Hablamos de búhos, cotorras argentinas y tórtolas turcas que campan a sus anchas. Todas estas colonias son producto del abandono por parte de sus dueños, tras haber estado estos pájaros muy de moda en los años 70 y 80.

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Al sol de Málaga

Prepárate para pasar un verano caluroso, con un elevado grado de humedad ambiental y unas altas temperaturas, especialmente cuando sopla el terral. Este viento seco puede hacer que el termómetro se dispare, llegando a superar los 44 grados.

Si prefieres no pasar tanto calor, reserva tu viaje para el invierno, porque en la zona costera de Málaga los meses invernales son realmente suaves y agradables. Y no te preocupes por la lluvia, porque la media de precipitaciones se limita a unos 43 días al año.

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Playa y sólo playa

Olvídate de visitar monumentos o museos en Guadalmar, porque aquí se viene a pasar el día en la playa y a disfrutar del ocio veraniego. Para los que no puedan pasarse sin un buen recorrido cultural, sólo tendrán que acercarse a la ciudad de Málaga. 

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La playa semiurbana de Guadalmar es la única naturista que hay en la ciudad. Se encuentra situada entre el Campo de Golf y el Paraje Natural de la Desembocadura del Guadalhorce, contando con 450 metros de longitud y alrededor de 30 metros de anchura. Es la primera que veremos si vamos desde el aeropuerto de Málaga hasta la capital. Si vas con niños y te preocupan los nudistas, tranquilo, porque tienen su propia área reservada.

Hora de comer en Guadalmar

En los numerosos restaurantes y chiringuitos de Guadalmar podrás degustar la rica cocina tradicional malagueña. Nada mejor después de una mañana de playa que tomarse una cervecita acompañada de unos boquerones fritos, o de unos calamares o de una de pulpo.

Si prefieres un buen plato de cuchara, apúntate a una cazuela de fideos, a un refrescante gazpacho, a un gazpachuelo o a un ajoblanco. Con el postre, no olvides tomarte un vinito dulce con denominación de origen Málaga. 

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De fiesta en fiesta

Además de una refrescante playa, en verano lo que también cuenta es una buena fiesta. Al margen de los bares de copas y discotecas que hay en la zona, en Guadalmar hay dos grandes fiestas estivales. La primera tiene lugar la noche del 23 al 24 de junio, por San Juan, y es tradición que los habitantes de la zona bajen a la playa para realizar la popular mojada de pies, tomar un helado y hacer la quema del "jua" en la misma arena de la playa.

La segunda gran fiesta veraniega, de gran tradición marinera, es la de la Virgen del Carmen, que se celebra el 16 de julio. Desde la playa de Guadalmar se lleva a la Virgen en procesión hasta llegar al paseo marítimo, donde encontraremos una iglesia emplazada en un bello paraje de eucaliptos junto al rio Guadalhorce.