Pueblos blancos de Málaga: Alcaucín

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Hablar de la comarca de la Axarquía, en Málaga, es hacerlo de naturaleza. Con una fauna y una flora impresionante, sumergirse en ella es una experiencia inolvidable. La belleza aumenta con los preciosos pueblos blancos que salpican el paisaje, como el de Alcaucín.

Se trata de uno de esos pintorescos pueblos andaluces de casas encaladas. En su caso, además, se halla en una situación privilegiada, en la sierra de Tejada, junto al corredor de Periana. A sus amables habitantes se les conoce como alcaucineños, aunque también reciben el simpático sobrenombre de “tiznaos”.

La luz es una constante en esta parte de España, ya que el clima mediterráneo local proporciona a la zona alrededor de 2.850 horas de sol al año. La temperatura media anual ronda los 16 grados centígrados, asciendo hasta los 30 grados en verano y desciendo hasta los 4 grados en invierno.

Fuente de la imagen: Diputación de Málaga

Qué ver en Alcaucín

En nuestra visita a esta villa malagueña descubriremos que su casco urbano aún conserva un trazado medieval formado por estrechas callejuelas. Éstas van descendiendo por una ladera hasta converger en la plaza principal. Aquí, además del Ayuntamiento, se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, que se remonta al año 1732.

Justo en la parte más alta del pueblo, junto al cementerio, se halla la Ermita de Jesús del Calvario, del siglo XVIII. Desde aquí se pueden contemplar unas espectaculares vistas del pueblo y de la sierra que lo rodea, de la Fuente de los Cinco Caños y de los diversos cortijos diseminados por los alrededores.

Nuestro recorrido monumental por la localidad debe incluir lugares como la ciudad fortaleza de Zalia, que esta situada sobre una zona elevada de terreno con una cima plana que lleva el mismo nombre, y las ruinas del castillo de Zalia, de origen fenicio. La oferta de naturaleza local también nos reserva parajes tan bellos como los farallones del Tajo de la Cueva, la Loma de las Monjas, el Morón de la Cuña o las Majadas.

Fuente de la imagen: Escapada Rura

La cocina tradicional de Alcaucín

En Alcaucín podremos recobrar fuerzas mientras degustamos la rica oferta gastronómica de la comarca de la Axarquía. Incluye recetas que han sido influenciadas por los frutos subtropicales que llevan años cultivándose en la zona, como chirimoyas, mangos, aguacates o papayas, además de otros cultivos de invernadero.

Son platos típicos de los restaurantes las gachas, la ensalada cateta, la sopa de tomates, las tortillas de bacalao, las habichuelas con hinojos y arroz, el chivo al ajillo, el gazpachuelo, el gazpacho, las sopas cachorreñas o el ajo blanco.

Fuente de la imagen: Diputación de Málaga

La oferta turística de Alcaucín

Alcaucín es uno de los agradables pueblos blancos de la Axarquía malagueña. Dotado de una gran encanto, su lista de atractivos incluye un buen patrimonio monumental, una gran oferta gastronómica, originales tradiciones y un entorno natural que deja impresionados a los visitantes.

La bella sierra de Tejada está surcada por numerosos senderos, ideales para realizar excursiones, tanto a pie como en bicicleta. Justo a orillas del río Alcaucín se encuentra el Área Recreativa El Alcázar, donde podremos ver las pequeñas cataratas que se forman en los primeros metros del cauce del río. A su alrededor nos cautivará la abundante vegetación.

Y no debes irte de Alcaucín sin haber comprado algún objeto de la artesanía local, como muebles de mimbre, artículos realizados en enea y esparto u objetos de rejillería.