Viladrau, el refugio del Montseny que enamora a todos
Viladrau se ha consolidado como uno de los destinos más atractivos del Montseny gracias a su mezcla única de naturaleza, historia y vida cultural.

Viladrau es un municipio de la provincia de Gerona situado en la comarca de Osona y cuyo término municipal está integrado en el Parque Natural del Montseny, parque incluido por la UNESCO en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera. Se encuentra sobre una colina a 840 metros de altitud y rodeado de paisajes espectaculares y rincones de gran belleza, se trata de un espacio privilegiado, un lugar idílico.
En este precioso pueblo del Montseny de unos 1.000 habitantes se pueden encontrar más de 200 fuentes. En su entorno el agua brota por riachuelos y fuentes, en un sinfín de zonas boscosas y verdes. Pero su núcleo urbano también muestra un rico patrimonio en edificios religiosos de gran interés histórico y artístico, además de otros edificios como torres y grandes casas ajardinadas.

Descubriendo el casco antiguo de Viladrau
El núcleo urbano de Viladrau está formado por calles estrechas y pequeñas que abocan a la Plaza Mayor, un lugar perfecto para sentarse y observar la vida local. Centro neurálgico del pueblo, es aquí donde se encuentran terrazas, tiendas, panaderías y restaurantes, en los que degustar la deliciosa gastronomía local. Muy cerca se encuentra la Iglesia de San Martín, tesoro arquitectónico y cultural. Documentada desde finales del siglo XI, presenta una fachada de piedra con elementos góticos y es un ejemplo magnífico de la arquitectura religiosa medieval en Cataluña.
También en el casco urbano encontramos la Capilla de la Piedad, conocida como La Pietat, fue construida en un momento de expansión del pueblo dando origen al Barri de La Pietat. Documentada en el año 1603, su entrada se configura como un alegante y amplio atrio. En su interior se encuentra la Madre de Dios de los Dolores e imágenes de los santos más vinculados a la parroquia. A lo largo del tiempo ha sido restaurada y ampliada, pero mantiene su encanto original.
Conforme se abandona el centro urbano, se ve que Viladrau es un pueblo de casas señoriales y unifamiliares. Rodeado de naturaleza y senderos preciosos, y siguiendo uno de ellos, se llega a Can Batllic, una masía desde la que se puede disfrutar de una panorámica extraordinaria. Documentada a principios del siglo XVII y en buen estado de conservación, presenta en su fachada principal un reloj de sol y un pozo.

Qué ver en Viladrau
Un sencillo trayecto a pie desde la Plaza Mayor conduce al Casal de la Sala de Viladrau. Levantada sobre una pequeña colina, la parte más antigua de la casa corresponde al siglo XIV, cuando se fortificó y fue transformada en Domus con una muralla cerrada y una torre de vigía. Su cuerpo central data del siglo XVII y está catalogada como Bien de Interés Cultural. Es precisamente aquí, en La Sala, donde en 1594, nació Joan Sala i Ferrer, más conocido como Serrallonga, uno de los más grandes bandoleros de la historia. Según cuentan, despertaba mucha simpatía entre la población por sus asaltos a los carruajes reales que recaudaban impuestos.
Viladrau también es conocida por ser la localidad de Cataluña donde hubo más persecución de brujas. Muchas mujeres fueron ejecutadas entre los años 1618 y 1622. Cada 31 de octubre, noche de Todos los Santos, se recuerda este hecho en la Plaza Mayor. Se trata del Baile de Las Brujas. Esta representación popular combina música, danza y fuego rememora estos episodios trágicos que sufrió el municipio. El Baile de las Brujas se ha convertido en uno de los festivales culturales más singulares del Montseny.
Para los amantes de las rutas, una de las más bonitas es la Ruta de Las Fuentes. Se trata de paseos cortos, sin ninguna dificultad, que se inician en la Plaza Mayor y que llevan a descubrir una naturaleza frondosa y exuberante y, por supuesto, numerosas fuentes. Se recorren zonas muy sombreadas en un ambiente fresco, por lo que son ideales para recorrer en verano. Todos los itinerarios están muy bien señalizados desde la Plaza y algunos pasan por el Arborètum, parque al aire libre configurado como un jardín botánico con plantas y árboles del Montseny. Este precioso parque con tanta vegetación y con paneles explicativos es un lugar imprescindible que no se pueden perder los visitantes de Viladrau.