El asturiano y legendario Castillo de Priorio
Conocido también como el Castillo de Las Caldas, esta fortaleza asturiana no se puede visitar por dentro, pero es un auténtico placer pasear por su alrededores.
Es como un castillo de cuento, y por supuesto carne de Instagram. Se trata del Castillo de Priorio, un imponente conjunto monumental ubicado en el término municipal de la ciudad de Oviedo, en Asturias. Su ubicación precisa es la pedanía de Las Caldas, que está separada por escasos kilómetros del casco urbano ovetense.
Rodeado por una gran arboleda que casi lo oculta y cubierto por hiedra, está situado junto al río Gafo, un afluente del Nalón. Es una fortaleza almenada que posee dos altas torres flanqueándola. Muy cerca del castillo, en la orilla izquierda del río, se puede ver un molino del siglo XIX que funciona mediante canal y cubo prismático de agua, y que todavía mantiene los mecanismos de las tres muelas.
Para llegar al Castillo de Priorio sólo tendremos que caminar un ratito junto a la carretera que va en dirección Casielles, hasta ver una senda o camino peatonal que bordea el río. Es un agradable camino asfaltado perfecto para hacerlo andando o en bicicleta, y que en cinco minutos nos acerca hasta el castillo.
El Castillo de Priorio
Edificado originalmente durante la Edad Media, y reconstruido en el siglo XIX, el Castillo de Priori es actualmente de propiedad privada. Parece ser que fue edificado en la época de Alfonso II muy cerca del río Gafo, y que posteriormente el conjunto monumental pasó a ser propiedad de San Juan de Priorio y, por tanto, del Obispado de Oviedo.
Desaparecida la construcción original, las primeras noticias documentadas del castillo posterior se remontan al siglo XIV. Llegó encontrarse en ruinas en el siglo XIX, y fue en esta época cuando fue comprado por Ramón Secades, cuyo hijo se encargó de reconstruirlo al estilo neogótico e historicista que primaba en el último cuarto del siglo XIX. Actualmente es propiedad de la familia Quijano, y no se puede visitar.
De la antigua edificación se conservan algunos restos de los muros perimetrales, dentro de los cuales se edificó el castillo actual. El castillo cuenta con dos torres almenadas con garitas ubicadas en sus ángulos. Las torres flanquean un cuerpo central que también está almenado.
La leyenda del Castillo de Priorio
Los nombres de todos los dueños del Castillo de Las Caldas aparecen inscritos en una lápida situada en uno de sus muros, y su historia se remonta al reinado de Alfonso II. Cuentan que fue este rey el que mandó construir la fortaleza original, y que se refugio en ella cuando huía de las huestes de Hixem I, a finales del siglo VIII. Pero de aquella edificación apenas queda nada.
Sí que se conserva una leyenda relacionada con el castillo que narra los desgraciados amores de Irene, la hija de Rodrigo, el que fuera señor de Priorio y dueño del castillo, con un paje llamado Pablo. Al enterarse el padre de los amoríos de su hija, decidió atacar a su amante por la espalda con una espada.
Pero el paje Pablo se defendió, y en el contraataque acabó con la vida de su señor. Se cuenta que Irene quedó destrozada y lo maldijo por haber matado a su padre, lo que llevó a Pablo, desesperado por perder el corazón de su amada, a lanzarse al río, donde se ahogó. Según la leyenda, todavía hay una roca donde se puede ver la sangre de Rodrigo.
