Santa Cruz de los Cuérragos, un pequeño gran pueblo zamorano

Si te va el turismo rural más auténtico, el que te lleva a destinos muy poco conocidos, donde las propuestas de naturaleza prevalecen ante la oferta de bares o tiendas, y donde te vas a asegurar que nadie te va a molestar, te proponemos un estupendo destino zamorano, el bello pueblo de Santa Cruz de los Cuérragos.

Se trata de un precioso pueblito que si visitas en otoño o en invierno puede que lo encuentres prácticamente deshabitado, pero la animación mejora, y mucho, en primavera y verano. Y es que ha pasado de ser un pueblo casi abandonado a empezar a recuperarse, poco a poco, gracias al turismo rural. Varias de las casas tradicionales de la localidad, hechas en piedra, con tejados de pizarra y balcones de madera, se están rehabilitando para orientarlas a negocios turísticos. Pero, tranquilo, la paz y la desconexión total siguen asegurados.

Un pueblo pequeño, pero de altura

Situado en plena sierra de la Culebra, Santa Cruz de los Cuérragos se halla sobre la ladera de Peña Castillo, a una altura de 900 metros. Y puede que sea un pueblo pequeño, pero eso no ha sido obstáculo para que haya sido declarado de Interés Turístico en la categoría de Conjunto Etnológico.

Olvídate del coche, y comienza tu estancia dando un paseo por este precioso pueblo zamorano, pero sin hacer ruido, porque aquí hasta hablar un poco alto llama mucho la atención. Y para pegar gritos y subir el volumen de la música ya hay otros destinos más propicios. Aquí se viene, sobre todo, a disfrutar de las estupendas vistas panorámicas de una naturaleza que invita a sumergirse en ella para realizar bonitas rutas de senderismo.

Pero también nos reserva este encantador pueblo algunos lugares de interés que visitar, como la Iglesia de la Santa Cruz, que es la que da nombre a la localidad; el Puente de los Infiernos, que hallaremos sobre el río Manzanas, o un antiguo molino que se encuentra en el valle, a la orilla del río, y que hoy en día está prácticamente invadido por la naturaleza, ofreciendo una maravillosa y bucólica imagen.

Las castañas de Santa Cruz de los Cuérragos

Ya hemos comentado que en invierno son pocos los habitantes que encontraremos en el pueblo, pero los hay, y en los meses de octubre y noviembre se dedican a una actividad tradicional, la recogida de castañas. Y es que en está zona abundan, entre otros muchas especies de árboles, los castaños, responsables de la preciosa estampa en tonos ocres, amarillos y naranjas que ofrece el paisaje en otoño.

Son los propios habitantes del pueblo los que, además de recoger sus frutos, cuidan los castaños y el monte con gran dedicación, convirtiendo la recogida de las castañas es uno de los momentos más especiales del año. También son ellos los responsables de vender estas ricas castañas a cuantos se acerquen a visitar el pueblo.

Y si buscamos un poco, pero sólo un poco más de animación, siempre podremos acercarnos a la localidad zamorana de Puebla de Sanabria, situada a 26 kilómetros en coche. Esta villa zamorana forma parte de la red de Pueblos más Bonitos de España, y está considerada Conjunto Histórico Artístico.