Cala Ferrara, una apuesta segura para el verano en Mallorca

Aguas de intenso color azul turquesa, arena dorada y un entorno natural de pinos y arbustos mediterráneos. Y es que Cala Ferrara es un playa de postal, pequeña pero dotada de todo lo necesario para disfrutar de unos maravillosos días en la isla de Mallorca.

Protegida del viento por acantilados, se encuentra ubicada en la urbanización de Cala d’Or, en el término municipal de Santanyí, un encantador pueblo que será un valor añadido a nuestra estancia en este paraíso balear.

Aunque, si lo preferimos, podremos disfrutar de Cala Ferrara sin movernos de este completo destino, donde hay una magnífica oferta de hoteles para que no nos falte de nada, y sólo tengamos que disfrutar del sol, el mar Mediterráneo y esta preciosa playa mallorquina.

Los atractivos de Cala Ferrara

Ya hemos hablado de sus espectaculares aguas turquesas, que son muy tranquilas, ideales para familias con niños, y de su suave arena dorada, donde tumbarse sin nada en que pensar ni hacer. Pero, además, Cala Ferrara cuenta con el distintivo de la Bandera Azul, que acredita la calidad de sus aguas y de sus servicios.

Y son muchos los servicios que nos ofrece esta playa balear, como alquiler de sombrillas y hamacas, servicio de socorrismo, un bar a pie de playa o servicio de masajistas. También está permitido fondear embarcaciones cerca de la boca de la cala, siendo la profundidad de hasta ocho metros.

Cuenta también con aparcamiento, y siempre hay sitio, ya que la mayoría de los que acuden a la cala se hospedan en los hoteles de alrededor, y lo hacen a pie. Tanta belleza, infraestructuras y servicios tiene su precio, y es que Cala Ferrara cuenta con un nivel alto de ocupación en temporada alta.

Otras playas de Cala d’Or

• Cala d’Or: de arena dorada y aguas color turquesa, se trata de una playa no muy larga, pero con una anchura de casi 100 metros de largo. Su oleaje es muy suave, por lo que resulta ideal para familias con niños. Cuenta con aseos y duchas, servicio de alquiler de hamacas y sombrillas y un bar a pie de playa. Está permitido el fondeo de embarcaciones junto a la línea de boyas, siendo la profundidad de tres metros.
• Cala Esmeralda: se la conoce también como Caló des Corrals, y es de arena dorada. Está muy protegida de los vientos y del fuerte oleaje, y dispone de un bar a pie de playa. Está permitido fondear en ella junto a línea de boyas, siendo la profundidad de cinco metros.
• Cala Serena: es una de las más tranquilas de la zona. De pequeñas dimensiones, se trata de una playa semi-virgen de arena con rocas en sus extremos. Está protegida del viento por pequeños acantilados, y resulta perfecta para el baño. No tiene servicios, pero gracias a eso su ocupación es menor.
• Cala Gran: también llamada El Caló, esta playa de arena posee la distinción de la Bandera Azul. Cuenta con todo tipo de servicios, y es la más grande de las cinco calas que hay en Cala d’Or. Ofrece a sus visitantes accesos para personas con movilidad reducida, servicio de socorrismo, alquiler de hamacas y sombrillas, aseos, duchas, un parque infantil y bares y restaurantes en primera línea de playa. Pero hay que madrugar un poco, porque su aparcamiento es algo pequeño.