Pueblo y playa de Andrín Asturias

Fuente de la imagen: Objetivo Asturias - El Comercio

Andrín es uno de esos muchos pueblos de postal que se pueden encontrar tanto en el interior como en la costa de Asturias. En este caso, es un enclave costero pero al estilo asturiano, rodeado de vegetación, y posee una pequeña pero encantadora playa.

Pertenece el concejo de Llanes, distando cinco kilómetros del municipio del mismo nombre, y cuenta una población de poco más de 150 personas.

Disfruta de un clima atlántico que le proporciona unos inviernos bastante suaves y unos veranos más bien frescos, con una temperatura media anual en torno a los 13 grados centígrados. Y como sucede en todo el Principado, las precipitaciones de lluvia son bastante abundantes a lo largo de todo el año.

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Paseando por Andrín

Lloviendo o no, la verdad es que siempre es una gozada recorrer esta pequeña población, descubriendo su patrimonio monumental y su bello entorno natural. Es muy recomendable acercarse a la Cueva de la Sonrosa, ubicada en la zona sudeste del pueblo, o al Mirador de la Garita, desde donde se contemplan unas magníficas vistas panorámicas.

Entre los edificios reseñables, mencionar la Capilla de Nuestra Señora, cuyo se origen se calcula en el siglo XV o XVI; la Iglesia de San Juan Bautista, del siglo XIX; la casona de los Beltrán, del siglo XVIII, o la casa del Conde Vega del Sella, del siglo XVII.

El más destacado de sus monumentos es la torre de Tronquedo, una edificación del bajo-medievo cuyo origen se sitúa entre los siglos XIV-XV. Fue propiedad de la poderosa casa local de los Duques de Estrada. Tras años de abandono y total desidia, a comienzos de los años 90 se llevaron a cabo trabajos de limpieza y consolidación.

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Qué comer en Andrín

La cocina de Andrín, como la de todo el concejo de Llanes, está repleta de recetas elaboradas con excelentes pescados y mariscos de su costa, como centollo, bogavante o bugre, entre otros, y por supuesto de platos que llevan como principal ingrediente las magníficas carnes del ganado asturiano. No hay que olvidar las verdinas, unas alubias pequeñas, arriñonadas y de color verde claro típicas del concejo.

Podrás degustar la lubina a la plancha o al horno, la langosta a la llanisca, el rape al horno, el besugo al horno o con fideos, el bonito en rollo o a la llanisca, el xáragu o sargo al horno, la marmita marinera, la merluza a la llanisca, el pote llanisco, la bolla, el lechazo al horno, el cabritu, el pantruque, la borona preñada o los tortos de maíz.

Y si te queda hueco, prueba un buen postre o un dulce. No falta el arroz con leche, pero también encontrarás buñuelos, magdalenas, hojaldres de Llanes, helado Peña Santa y buenos quesos artesanales. Los hay hechos con de leche de vaca, como el Vidiago y El Injiestu; de oveja y de vaca, como los de Porrúa, Parres, Piedra, Caldueño y Las Careras, y un rico queso ahumado, el de Pría.

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Recursos turísticos de Andrín

Además de contar con un privilegiado entorno natural, nos maravilla también la playa de Andrín. Es de arena blanca y fina, y cuenta con 240 metros de longitud. Se trata de una playa de fuerte oleaje que en bajamar se une con el arenal de La Ballota, que posee un islote y su propio bar especializado en parrilladas de pescados y mariscos. Muy cerca hay un potente bufón localizado muy cerca de la Punta Ballota, y que puede verse en acción durante los días de mucho oleaje.

Los amantes del golf tienen un excelente campo a sólo 300 metros de la localidad, y para los que prefieren ir a la montaña, a sólo 30 minutos se hallan los Picos de Europa.

En cuanto al calendario festivo de Andrín, sobresalen las fechas del 24 de junio, San Juan Bautista, y los días 14 y 15 de agosto, en los que se conmemora Nuestra Señora de la Asunción.