Outariz, un lugar en Ourense para relajarse

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Outariz es una población de la provincia de Ourense orientada al turismo termal y situada junto al río Miño. Con amplias opciones de relajación, belleza y salud, tanto de forma gratuita como privada, en esta localidad gallega disfrutarás de una experiencia muy especial.

A este paraíso termal se puede llegar desde la ciudad de Ourense en el Tren de las Termas, que sale desde la Plaza Mayor. También se puede acceder en coche por la carretera OU-402, pero se debe aparcar el vehículo en uno de los tres aparcamientos gratuitos, ya que toda la zona es peatonal. Si queremos ir en autobús, la línea 5 tiene parada en el aparcamiento de Pozas de Maimón. Desde allí sólo hay que cruzar una pasarela peatonal para acceder al área de Outariz.

Fuente de la imagen: Rinconalia

Las Pozas de Outariz

La zona de uso gratuito de Outariz se divide en dos partes diferenciadas que se encuentran separadas por un puente peatonal. Dicho puente comunica la carretera OU-402 con el recinto. En la parte de arriba se hallan las Pozas de Outariz, mientras que en la zona de abajo están las Burgas de Canedo. Ambas zonas disponen de una poza de agua fría y tres de agua caliente, aunque la zona de baño de las Burgas es algo más grande.

Las aguas de las pozas son de mineralización débil, y están fluoradas, silicatadas y bicarbonatadas. Por este motivo resultan especialmente beneficiosas para dolencias como las artritis o el reuma. Manan a una temperatura de 60ºC, aunque al llegar a la zona de baño ya han descendido considerablemente.

Las pozas están rodeadas de jardines, y cuentan con servicios como duchas de agua caliente y fría, fuentes, bancos, aseos o bar. A las pozas se accede de forma gratuita, y disponen de una gran zona de aparcamiento.

Fuente de la imagen: sendereando.es

Las Termas de Outariz

La estación termal de Outariz se construyó siguiendo la milenaria filosofía japonesa del Onsen. Sus principios se basan en el total respeto y armonía con la naturaleza. Por ello es el lugar ideal para relajarse, rodeado de mucha paz. El recinto cuenta con 11 termas exteriores.

También dispone de dos circuitos interiores: el circuito Zen y el circuito celta. El primero es de aguas tranquilas, con piedras ovaladas y construcciones de madera, estando destinado a la relajación y la meditación. El circuito Celta está inspirado en la arquitectura de los castros, siendo sus termas de piedra. Las aguas están en constante movimiento, contando con chorros, burbujas y cascadas. Es ideal para liberar tensiones y relajar las contracturas musculares.

En estas termas también se puede disfrutar de rotenburos y ofuros, que son termas tradicionales japonesas; jacuzzi, chorros de gravedad, sauna, cuevas, toneles de agua fría para baños de contraste y un spa con efectos de corrientes, géiser, catarata y camas de agua. También ofrecen masajes y tratamientos de belleza, como chocolaterapia, vinoterapia, peeling o envolturas de barro, algas o té. El precio de un circuito termal es de alrededor de seis euros por personas, y da derecho a dos horas de estancia en las instalaciones.