Navarra, un completo destino para todo el año
Tanto si te gusta el norte de España, como si no, Navarra te atrapará. La belleza de su paisaje, su oferta gastronómica, sus eventos culturales o sus fiestas son sólo algunos motivos para visitar esta pequeña y sugerente comunidad foral.
La Comunidad Foral de Navarra, en el norte de España, es un destino fascinante a tener muy en cuenta. Por su pequeño tamaño, y recorriendo cortas distancias, llegaremos enseguida a bellas ciudades y pueblos, y descubriremos excepcionales paisajes.
Situada junto a la Cordillera Pirenaica, el Camino de Santiago atraviesa esta comunidad. Cada una de sus zonas cuenta con sus propios encantos, como el Pirineo Oriental, las Sierras de Aralar y Urbasa, la zona de La Ribera, los Pirineos Atlánticos, Tierra Estella o la Zona Media de Navarra, sin olvidarnos de la ciudad de Pamplona, la capital navarra.
Su clima varía de unas zonas a otras, confluyendo en esta comunidad foral todos los tipos de clima. La zona noroeste posee un clima de tipo atlántico, aunque también cuenta con un clima de montaña en las zonas más altas. Pamplona, la Zona Media y las Cuencas Prepirenaicas tienen un clima de transición, con temperaturas más extremas tanto en los meses de invierno como en los de verano. La zona sur de Navarra es la que disfruta de un clima más suave, de tipo mediterráneo continental.
Qué ver en Navarra
Es muy difícil incluir en este artículo todos los lugares de interés cultural, monumental y paisajístico que posee Navarra, pero te ofrecemos una pequeña selección de los sitios más relevantes.
Si lo que te van son los lugares monumentales y con historia, apunta: Ruinas romanas de Andelos, una antigua ciudad romana ubicada a 6,5 kilómetros al sur de Arellano; el Monasterio de La Oliva, del siglo XII, que está en el pueblo de Carcastillo; el Monasterio de Santa María de Eunate, en Muruzábal, del siglo XII; el Monasterio de Irache, emplazado entre Estella y las faldas de Montejurra; el Monasterio de San Salvador de Leyre, en Yesa; el Castillo de Javier, las murallas de Pamplona, el Castillo de Marcilla o la Catedral de Santa María de Pamplona, entre otras muchas propuestas.
Para los que prefieren la naturaleza, la oferta es impresionante: las Bárdenas Reales, un paraje semidesértico considerado Reserva Mundial de la Biosfera; el Nacedero del río Urederra, ubicado entre las sierras de Urbasa y Andía; el Parque Natural del Señorío de Bertiz, los Robledales de Ultzama, el Parque Natural Sierra de Urbasa-Andía, la Selva de Irati, las Reservas Naturales de las Foces de Lumbier y Arbayun o la Reserva Natural del Embalse de las Cañas.
Las propuestas turísticas de Navarra
Al igual que sucede con su clima y su paisaje, la oferta gastronómica de Navarra resulta de lo más variada. En la comunidad foral se elaboran buenos quesos, hay magníficas carnes de caza y del ganado local y excelentes productos de la huerta, como los espárragos o los pimientos. Para beber, nada mejor que los vinos de la Zona Media. Y aquí, como en el vecino País Vasco, también existe una gran tradición de pinchos. Podremos escoger entre pinchos más tradicionales y otros de cocina creativa y vanguardista, pero todos ellos resultan una auténtica delicia para el paladar.
En cuanto a las propuestas de ocio, los aficionados al turismo activo disfrutarán en el Pirineo Navarro de maravillosos parajes naturales, ideales para practicar senderismo, barranquismo, rutas en bicicleta o a caballo, rafting, pesca, espeleología, piragüismo o vuelo en ultraligero, entre otras posibilidades. Para los que buscan un turismo rural más tranquilo y relajado, cuentan con lugares tan atractivos como la Selva de Irati, o tan interesantes como las cuevas de Zugarramurdi y el Museo de las Brujas.
El Camino de Santiago que empieza en Roncesvalles pasa por Navarra, atravesando poblaciones como Puente la Reina, Sangüesa, Estella-Lizarra, Zubiri o Pamplona. En esta última ciudad tiene lugar una de las fiestas con mayor proyección internacional de cuantas se celebran en España, los Sanfermines.
