Las mejores bodegas de Lleida
Si disfrutas haciendo turismo enológico no puedes perderte este recorrido por las mejores bodegas de Lleida. Fincas centenarias, agricultura ecológica y elaboración 100% tradicional capaz de sorprender a todos los públicos.
Vinos especiales difíciles de encontrar en ningún otro lugar, así son los caldos elaborados en Lleida gracias a todas sus particularidades, como el contraste térmico producido por la altura en la que son cosechados. Disfruta de un recorrido por las mejores bodegas de este rincón de Cataluña en el que, además, podrás gozar de su naturaleza y gastronomía.
Todas estas bodegas cuentan con la Denominación de Origen Costers del Segre y no es para menos pues por el clima al que se enfrentan, los recursos naturales de los que disponen, los paisajes que ofrecen y, sobre todo, la calidad de su vino, lo merecen. Una especie de alquimistas del vino podrían llamarse, ¿te animas a conocerlos?
Bodega Clos Pons
Viñas, olivos y almendros es lo que encontramos en la bodega Clos Pons, que se encuentra en el centro de Les Garrigues. Este refugio, que acoge a sus visitantes con los brazos abiertos, es una construcción de piedra y madera, inspirada en las bodegas de California, Australia o Nueva Zelanda, que invita a vivir una experiencia única. Se ve rodeada de viñedos ecológicos y se palpa en el ambiente que respeta su entorno natural.
Las visitas a esta bodega de Lleida empiezan con un desayuno de productos típicos en el que el aceite de sus olivos es el protagonista. Antes de ser bodega, Clos Pons ha trabajado el aceite durante cuatro generaciones y está presente en más de 140 países. Tras este completo tentempié, se realiza un recorrido por el proceso de elaboración del vino y, para acabar, se degustan los mejores vinos. Además de este tipo de visitas, ofrecen también talleres, packs de diferentes experiencias y la posibilidad de pertenecer a su Club de Vinos.
Bodega Castell d’Encús
Esta bodega tiene su origen en el año 2001, cuando Raül Bobet indagaba sobre terrenos en los Pirineos catalanes que pudieran disminuir los efectos del cambio climático en la viña. La finca tiene una buena exposición al sol y está rodeada de bosques frondosos; además se sitúa junto a una ermita y a lagares antiguos picados en la piedra que utilizaron los monjes hospitalarios en el siglo XII. Sin duda, un conjunto que desprende belleza por sí solo.
Trabajan la agricultura orgánica y no utilizan ningún insecticida, herbicida o fungicida. La vendimia la siguen haciendo manualmente cada año y solo con la uva de la finca. Posteriormente, el vino se fermenta en acero inoxidable, barreños de madera o lagares de piedra naturales. La visita incluye un recorrido por la parte histórica, la visita a la propia bodega y una cata de vinos, al finalizar.
Bodega-Restaurante Castell del Remei
La bodega Castell del Remei fue la primera en elaborar y etiquetar vinos de crianza en Cataluña, situada en la finca de la colonia agrícola más importante de final del siglo XIX. Los primeros datos de actividad datan de 1780, aunque hay rastros que indican que pudo haber incluso en la época romana. Fue pionera en importar cepas desde Francia y, desde hace muchos años, recibe premios internacionales y altas puntuaciones en sus vinos.
En las visitas que ofrece se recorren las instalaciones más antiguas, pero también las más actuales; las salas por las que sigue el proceso de elaboración el vino y, para acabar, ofrece una cata de vinos. Existe la posibilidad de realizar otro tipo de visitas más pedagógicas para estudiantes así como cursos más específicos de iniciación a la cata. La bodega cuenta con un restaurante en el que poder disfrutar de la calma de la naturaleza que lo envuelve, además de poder degustar sus vinos en una cocina excelente.