Arenas de San Pedro, en el Valle del Tiétar, Ávila
Situado en la comarca conocida como “La Andalucía de Ávila”, el pueblo de Arenas de San Pedro ofrece un buen clima, un precioso entorno natural, antiguos monumentos y una fantástica oferta gastronómica.
Estamos en la comarca del Valle de Tiétar, y más exactamente en la zona del Bajo Tiétar, que muchos conocen como “La Andalucía de Ávila”, debido, sobre todo, al excepcional microclima que disfruta esta parte de la provincia de Ávila, con temperaturas muy suaves todo el año. Y su capital es el pueblo de Arenas de San Pedro, un lugar donde disfrutar de la naturaleza, del arte, de la buena gastronomía y de ancestrales tradiciones.
El municipio se encuentra en la vertiente meridional de la Sierra de Gredos, y posee un entorno natural excepcional. Si a ello unimos su magnífico patrimonio monumental, que incluye algunos edificios declarados Bienes de Interés Cultural, la visita a este pueblo abulense resulta de lo más estimulante.
Qué ver en Arenas de San Pedro
Nuestra visita a Arenas de San Pedro comienza en el centro de la localidad, donde se halla el Castillo de la Triste Condesa, poseedor de una imponente Torre del Homenaje. Tras haber funcionado como prisión y de cementerio, hoy en día acoge el Auditorio municipal, un museo y una sala de exposiciones y congresos, y fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1931. Otro edificios que llamarán nuestra atención son la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI y dotada de una gran torre-campanario, y el Palacio del Infante don Luis de Borbón.
Otras recomendables visitas son las de la Cruz del Mentidero, que se encuentra en la rotonda del castillo; el Hospital de San Bartolomé, situado a plaza de Isabel la Católica, que fue la Reina que financió su construcción; la Plazuela de las Monjas Agustinas, donde se halla la Iglesia de San Juan Bautista, o la Ermita del Cristo de los Regajales, situada en la calle Carrellana.
Ya las afueras de Arenas se halla el Puente Romano o de Aquelcabos, que en realidad es de origen medieval, aunque fue construido sobre otro anterior de procedencia romana. Y a sólo tres kilómetros está el Santuario de San Pedro de Alcántara, del siglo XVI, catalogado como Monumento Histórico Artístico. En él hay una huerta donde crece un peculiar rosal sin espinas que, según cuenta una leyenda, fue un milagro del propio San Pedro de Alcántara.
Las Cuevas del Águila
A seis kilómetros de Arenas de San Pedro están las Cuevas del Águila, que fueron descubiertas en el año 1963. Se desconoce su origen exacto, pero los expertos calculan que tienen entre 500 mil y un millón de años. Se hallan en el Cerro de Romperropas, también conocido como Cerro del Águila, y de ahí su nombre. Las cuevas se encuentran a 50 metros de profundidad, y mantienen una temperatura de entre 15 y 17 grados centígrados, siendo la humedad cercana al 100%.
Están en perfecto estado de conservación, y son transitables en su totalidad. Introducirse en ellas es sumergirse en un impresionante mundo subterráneo, el cual está plagado de estalagmitas, estalactitas, columnas y coladas espeletémicas, anthoditas, excéntricas, acículas o escudos. La visita se realiza a pie, siendo recomendable llevar un calzado apropiado debido al alto grado de humedad. Justo a la entrada podremos ver unos paneles con toda la información que nos será útil para realizar el recorrido.
El horario para visitar la cueva en verano es de lunes a domingo de 10:30 a 13:00 y de 15:00 a 19:00 horas. En invierno abre también todos los días, aunque por la tarde cierra una hora antes, a las 18:00 horas. En cuanto a los precios, la tarifa general es de 8 euros, siendo la entrada gratuita para los menores de 5 años. Las entradas se pueden comprar online o en las mismas cuevas. Se puede obtener más información en los teléfonos 920 377 107 y 660 842 493 y en la página web de las Cuevas del Águila.
