El pueblo de Burgos de un solo habitante que alberga una joya arquitectónica
Villamorón es un pequeño pueblo de la provincia de Burgos que tiene un solo habitante censado pero que cuenta con un tesoro arquitectónico: la iglesia de Santiago Apóstol, considerada la primera construcción gótica de la región y uno de los mejores ejemplos del protogótico de España.
A unos 45 kilómetros de la ciudad de Burgos, en la vertiente septentrional de Castilla y León y en pleno páramo, se encuentra Villamorón, un pequeño núcleo cuyo título es el de tener un solo habitante. Sin embargo, esconde una de esas joyas arquitectónicas con la que pocas veces se puede encontrar el viajero.
Se trata de la Iglesia de Santiago Apóstol, un templo considerado el germen del estilo gótico en el reino de Castilla y considerado el “promotor” del estilo que sirvió como prototipo a las iglesias fernandinas andaluzas levantadas durante la reconquista. Se llaman así esas iglesias que Fernando III el Santo mandó construir entre mediados del siglo XIII y principios del XIV.

Historia de Villamorón
Durante la Edad del Hierro, hace unos 2.500 años, se instalaron aquí ganaderos que dejaron su huella: una importante necrópolis y un poblado. Posteriormente fue ocupado por los celtíberos y, más tarde, se convirtió en una villa romana. Cerca de aquí pasaba la vía romana que, desde Sasamón, un pueblo cercano, se dirigía al puerto de Flaviobriga, Castro Urdiales.
Parece ser que gracias a este camino, que generaba cuantiosos ingresos, y gracias también a los tributos que se pagaban a los señores del lugar, Villamorón prosperó en los primeros albores de la Edad Media. Su enclave, muy cerca de la orilla del río Brullés, también impulsó su desarrollo cuando era denominada Villa de Mauronta.
A finales del siglo XVI, Villamorón y Villegas, población a un kilómetro de distancia, aparecen como una única entidad jurídica. En 1752, según los datos del catastro del marqués del Ensenada, Villegas-Villamorón fue declarada villa de realengo. En la segunda mitad del siglo XX, contaba con unos ciento cincuenta habitantes, los cuales fueron emigrando hacia poblaciones cercanas o hacia Burgos, la capital. En la década de los años setenta, la última familia censada, abandonó el pueblo. Hoy en día, sólo un vecino sigue censado, por lo que esta población se puede incluir entre las muchas que configuran la España vacía.

La iglesia de Santiago Apóstol
El esplendor de la población durante la Edad Media se ve reflejado en la construcción, a principios del siglo XIII, de la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol. Edificado con muros de sillería, consta de tres naves, la central de mayor altura, y una cabecera casi cuadrada sobre la que se alza una torre compacta de aspecto defensivo, pues parece más adecuada para servir de fortaleza que para ser utilizada como templo. Su fachada meridional, en la que se abre una portada de cuatro lisas arquivoltas ojivales, está protegida por un amplio atrio.
La también llamada “Iglesia del Páramo”, presenta en su exterior una decoración influida por el último románico consistente en unos arquillos ciegos que recorren los muros de la cabecera, también varias hileras de sencillos tacos de piedra y una solitaria gárgola rematada por la cabeza de un demonio. El interior, dividido en cuatro tramos, se encuentra cubierto por bóvedas de crucería simple. Cuenta con seis pilares que se adornan con columnas y lucen con motivos vegetales y rostros. Un magnifico rosetón ilumina el templo. De cuatro metros y medio de diámetro, conserva restos de la original vidriera gótica. Bajo el rosetón se puede admirar un coro de madera del siglo XVI.
Declarada Bien de Interés Cultural en 1994, la iglesia podía caer en el olvido, al igual que lo hizo la población. Sin embargo, hace poco más de 20 años, se formó la Asociación de Amigos de Villamorón para intentar salvarla de la ruina. Con una subvención de la Junta de Castilla y León, se han podido finalizar las obras de la restauración de la nave central. El resultado de dicha restauración ha sido premiado por una asociación europea, Future for Religious Heritage (Futuro del Patrimonio Religioso), dedicada a la conservación de lugares de culto. En 2024, el proyecto de la Iglesia del Páramo quedó entre los finalistas de los premios Religious Heritage Innovator of the Year 2024 (Innovación del Año en Patrimonio Religioso). La asociación cultural Amigos de Villamorón mantienen abierta al público la iglesia todos los sábados y domingos del mes de agosto en horario de mañana y tarde.