El Museo de vehículos históricos de Guadalest

Si eres amante de los vehículos antiguos, este museo te va a resultar un auténtico paraíso. Se encuentra en el municipio de Guadalest, en la provincia de Alicante. Visitar este museo es como hacer un viaje al pasado, ya que pueden verse más de 140 motos y coches pequeños en perfecto estado, que van desde los años 20 a la década de los 70.

El Valle de Guadalest posee un gran encanto por su localización, su cultura, pero también su historia y, por supuesto, sus museos. Sin duda, el Museo de vehículos históricos es uno de los más curiosos y llamativos para todas aquellas personas que visitan la localidad.

Museo de vehículos históricos de Guadalest

El museo está ubicado en una sala de unos 500 metros cuadrados y alberga cerca de 130 motos de 45 marcas diferentes. Cuenta también con algunos automóviles de pequeño tamaño y, en él, pueden verse marcas tanto nacionales como internacionales. Además, el museo está decorado con objetos antiguos como teléfonos, radios, máquinas de coser o de escribir y cafeteras. Con esto, se consigue ofrecer un empaque realmente vintage al visitante.

También cuenta con una tienda en la entrada, en la que se abona la entrada del museo y hay artículos relacionados con los vehículos clásicos como juguetes, gorras, llaveros, tazas, coches a escala, camisetas y otros objetos relacionados con el mundo del motor. Además, se pueden encontrar algunos productos regionales para llevarse de recuerdo.

El museo dispone de un aparcamiento en la entrada en el que poder dejar el coche sin ningún problema, y el horario de visita es de lunes a viernes y domingos de 10:30 a 18 horas. Los sábados está cerrado. En verano suele alargar el horario de visita y permanecer abierto hasta las 19:30 horas, pero es recomendable consultar las fechas de vacaciones en las que está cerrado para no llevarse una sorpresa. Los precios de la entrada oscilan entre los 3 y los 4 euros, y los menores de 6 años entran gratis.

Historia del Museo de vehículos antiguos de Guadalest

Quizás una de las preguntas más habituales es ¿cómo han llegado todos estos vehículos hasta aquí? El precursor de este espacio es Ricardo Francés, natural de Benifato, y con una gran pasión hacia las motocicletas y coches desde muy joven, pues con tan solo 13 años ya conducía la Vespa de su padre. Junto con su mujer fundó un restaurante, ‘El Riu’, y gracias a los beneficios de este negocio fue adquiriendo diferentes automóviles, que recuperaba poco a poco.

Durante 25 años fue comprando y restaurando más modelos, de marcas como Guzzi o Ducati. Con el tiempo, amplió miras, fue buscando motocicletas por toda la zona del Levante y, más tarde, asistió a ferias especializadas del motor por toda España.

Finalmente, decidió abrir el Museo de vehículos históricos de Guadalest en el año 2003 para poder compartir este entusiasmo con el resto de la gente. Todo lo que puede verse se debe a su gran afición, pero también a la de amigos y mecánicos que le ayudaban y colaboraban con él, así como al apoyo de su familia.